Solucionar humedades de capilaridad con revestimientos impermeabilizantes es un error

Si aparecen manchas o indicios de humedades en la parte baja de las paredes o muros en una zona de la casa donde sabemos que no pasa ninguna tubería de agua ni  ninguna bajante y tampoco se trata de una pared de fachada o exterior entonces debemos asumir que se trata casi con toda seguridad de un problema de humedades por capilaridad.

Las humedades por capilaridad aparecen siempre en las partes bajas de paredes de sótanos  y plantas bajas, nunca en una primera planta que esté por encima de los 2 metros. Son un tipo de humedades muy frecuentes, junto con las humedades de filtración y las humedades de condensación y aparecen tanto en edificios antiguos como en aquellos construidos recientemente.

Humedades de capilaridad en casa

Las humedades ascienden por las paredes, desde el terreno, por un fenómeno físico llamado capilaridad, hasta una cierta altura. Es el mismo fenómeno que sucede en una esponja o en un terrón de azúcar. La altura que alcanza depende de varios factores (porosidad del material, la humedad del suelo, las posibilidades de salida del agua por evaporación, etc.).

Hay casos en los que solo se ve por encima del zócalo, otros que llega a casi un metro de altura e incluso más. En las paredes se ven manchas oscuras, se cae la pintura o revestimiento y aparecen sales cristalizadas, a veces con apariencia de una pelusilla blanca.

Un error muy común para solucionarlas es aplicar un revestimiento impermeable o impermeabilizante. Sirve inicialmente para tapar las humedades pero el problema sigue ahí. Incluso como la pared ya no transpira y el agua no se puede evaporara las humedades incrementan su altura y tendremos un problema mayor.

La mejor solución y la más económica ya que la puede hacer uno mismo es solucionar humedades mediante higroconvectores Knapen.