Las humedades de condensación se manifiestan a
través de manchas en las paredes y presencia de moho y se
da principalmente en los meses de invierno.
Se produce porque el vapor del ambiente se condensa en
las paredes y se forma agua. Esta es la causa de la formación
de moho, principalmente en las paredes de la cara norte y detrás
de muebles, armarios, camas o mesillas. Este vapor también se condensa a veces
en las ventanas formándose charcos de agua alrededor del marco.
Independientemente de los problemas estéticos, la
respiración de este aire húmedo puede causar problemas de salud en los
habitantes de la casa, principalmente los más afectados son niños y personas
mayores.
Los deshumidificadores normalmente no resuelven el problema
y a veces pueden ser perjudiciales ya que descomponen el oxígeno y se respira
aire electrizado.
La manera más eficaz para eliminar las humedades de
condensación es creando un intercambio de aire. Esto se puede realizar a
través de sistemas diseñados especialmente para eliminar humedades de condensación, creando una ventilación forzada que produce un intercambio
continuo de aire.
Una de las zonas sensibles de las viviendas a los problemas
de humedades son los cuartos de baño. En muchos casos se hace necesario complementar
al sistema de ventilación mecánica, con un extractor de baño.
Este extractor se coloca en una pared de fachada.
Previamente se realiza un agujero de sección circular y diámetro según el
modelo de extractor, pero normalmente de aproximadamente 120 cm.
Cuando en el ambiente interior se forma un porcentaje
de humedad superior a un porcentaje que se configura inicialmente, a través de un sensor, se enciende el extractor
expulsando el exceso de vapor (por ejemplo, cuando nos duchamos o bañamos). Si la humedad ambiental desciende de ese valor, el
extractor se apaga directamente.
Es una solución que funciona muy bien como complemento a un sistema de ventilación mecánica
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